En lo personal relaciono la imagen con el Super Yo
propuesto por Freud. Aunque en Freud prima la perspectiva biologicista, no
desatendió la importancia de la sociedad y la cultura, pues ésta se halla
presente en la mente del individuo en el superyó. El niño aprende de sus padres
el código moral y valorativo que determinará sus actitudes y motivaciones
posteriores; este aprendizaje se da fundamentalmente en las etapas pregenitales
y como consecuencia del temor al castigo y de la necesidad de afecto. El
superyó tiene como función integrar al individuo en la sociedad. Es la
instancia que va a observar y sancionar los instintos y experiencias del sujeto
y que promoverá la represión de los contenidos psíquicos inaceptables. En gran
medida su influencia en la vida del sujeto es inconsciente. En el superyó se
suele distinguir el llamado "ideal del yo" de la "conciencia
moral", el primero para señalar las situaciones, estados y objetos
valorados positivamente por el sujeto y a las que tenderá su conducta, y la
conciencia moral para designar más bien el ámbito de las prohibiciones y las
sanciones a las que las personas creen que deben someterse.
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